MENSAJE DEL PRESIDENTE
Ing. Sergio R. Almazán Esqueda
El 22 de abril celebramos el Día de la Madre Tierra. Se trata de un festejo internacional sobre la importancia que tiene para los seres humanos conducirnos por el camino más limpio, ecológico y sostenible. Es una fecha para la reflexión y para recapitular las acciones que estamos tomado con el objetivo de favorecer al medio ambiente.
En el caso de la minería, todos, y lo digo con absoluta seguridad, todos los que participamos en esta industria, estamos poniendo nuestro mayor esfuerzo para mejorar nuestros procesos productivos y reducir cada vez más el impacto al ambiente.
Diversas han sido las estrategias que hemos impulsado los técnicos y profesionistas vinculados con las Ciencias de la Tierra para optimizar el consumo de agua y evitar la descarga de aguas residuales; utilizar la energía de manera eficiente y reducir las emisiones de gases efecto invernadero; manejar y disponer los residuos de manera adecuada y minimizar su generación; y conservar y proteger la biodiversidad.
En nuestro caso, como Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México, los más de 3 mil asociados, desde nuestros respectivos ámbitos, estamos trabajando por lograr la máxima armonía entre los procesos productivos y el medio ambiente.
Este trabajo conjunto de todos los trabajadores, profesionistas, empresarios, proveedores e investigadores de la industria minero-metalúrgica, junto con autoridades federal, estatales y municipales, nos enorgullece y confirma nuestra responsabilidad para contribuir con la recuperación económica de México.
En el sector industrial minero-metalúrgico existe confianza y responsabilidad para realizar las mejores acciones en pro del medio ambiente y en favor de las comunidades, como ejemplo podemos mencionar que en 2020 se invirtieron 4,733 millones de pesos en la protección del medio ambiente, presupuesto que es 3.6 veces mayor al destinado al programa de apoyos para el desarrollo forestal de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Que no exista ninguna duda que en la industria minera de México estamos trabajando para favorecer al planeta.
Los invito a que continuemos por ese sendero que, sin duda, beneficiará a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos.