Ayude a su equipo de trabajo a resolver problemas
Por: Juan Manuel González C.
Los jefes no deben sucumbir a la tentación de creer que tienen todas las respuestas para todos los problemas en el trabajo y deben dejar a sus equipos que busquen las soluciones por sí mismos. Cuando un equipo se enfrenta a un problema, el mejor enfoque que un jefe puede dar, es hacer preguntas que ayuden al equipo a obtener respuestas por sí mismo.
Los empleados con mucha frecuencia piden ayuda y guía a su jefe ante un problema de trabajo. Como jefe usted no puede evitar sentirse un poco halagado. Obviamente cuando los empleados piden ayuda están perplejos y esperan que usted tenga la respuesta. Quizá usted relata una historia impresionante, o dos, y luego les dice qué hacer. Aunque es increíblemente satisfactorio, este enfoque, rara vez funciona.
En primer término, puede ser que usted no esté ayudando a resolver el problema ya que no está al frente de la línea de trabajo como ellos y, en segundo término, tampoco estarán totalmente comprometidos para que la idea que usted dio funcione, después de todo, la “idea” no se les ocurrió a ellos y si no funciona los empleados terminan diciendo “sabíamos que esa idea no funcionaría”.
Frederick Winslow Taylor -padre de la administración científica-, cuyas ideas fueron ampliamente influyentes, enseñó a los ejecutivos a supervisar estrechamente a los empleados, diciendo que los trabajadores tratan deliberadamente de no hacer más de un tercio de un día de trabajo adecuado, mientras fingen aparecer lo más ocupados posible. Afirmó que los gerentes deben pensar y decirles a los demás qué hacer, porque los trabajadores no son lo suficientemente inteligentes como para manejarse solos.
Hoy, esas ideas parecen totalmente equivocadas. Casi el 17% de la población en México de 25 años o más tiene al menos una licenciatura. Las generaciones más jóvenes cada vez tienen más conocimiento de datos y alfabetización tecnológica. El enfoque de Taylor ha sido rebasado y ya hay una comprensión diferente del liderazgo. En su primera entrevista tras convertirse en CEO de Microsoft, Satya Nadella dijo a The New York Times: «Quizás lo primero que los líderes tienen que hacer es reforzar su confianza en las personas que dirigen». Tres años después, fue más específica: “He llegado a entender que mi trabajo principal es curar nuestra cultura para que cien mil mentes inspiradas, los empleados de Microsoft, puedan dar forma mejor a nuestro futuro”.
Hoy se está dando paso a formas más ágiles de trabajo. En lugar de que los jefes den respuestas a los equipos sobre los problemas de trabajo, el resultado sería mucho mejor si se hace a los empleados las siguientes tres preguntas:
¿Qué recomendarías hacer? Ya que usted no suele preguntar esto, cuando los empleados se hayan recuperado de la sorpresa, aprenderán a acudir a cualquier discusión preparados con alguna idea propia. Si no tienen preparada una recomendación, se puede hacer una lluvia de ideas durante un tiempo, pero eventualmente se les debe pedir que tengan una. En los Estados Unidos, el 75% de las ideas de innovación más prácticas y efectivas provienen de los trabajadores de primera línea más cercanos a los clientes y a las operaciones.
¿Cómo podemos probar si esa idea funciona? Un enfoque de primera prueba permite a un líder dejar que la idea del equipo se pruebe a un costo y riesgo relativamente bajos. Presionar al equipo a crear un prototipo y ver si va a funcionar. Los sistemas empresariales son complejos. Las ideas que suenan bien no siempre se reproducen como se esperaba en el mundo real. Las pruebas ofrecen sorpresas útiles y, con la práctica deliberada, lo mejoramos.
¿Qué necesitas de mi como jefe? Pedirles a los empleados que piensen en los obstáculos que enfrentarán y pedirles que expresen qué puedo hacer, como su jefe, para ayudarles a abordarlos. ¿Necesitas recursos? ¿Dinero? ¿Un entorno de pruebas? ¿Acceso a compañeros de equipo con ciertas habilidades? Esto le impone al jefe la parte correcta de la carga y asegura que el jefe trabaje para facilitar y acelerar el trabajo.
A nivel mundial, solo el 15% de los empleados están realmente dedicados a su trabajo. La firma Bain & Company, ha descubierto que las empresas que liberan el tiempo, el talento y la energía de las personas desarrollan empleados más comprometidos y 40% más productivo. Sin embargo, es muy importante que la forma en que los gerentes tratan a sus empleados vaya más allá de la productividad y los beneficios.
Fuente. Harvard Business Review. Darrell K. Rigby, socio de Bain & Company.